“Nunca, en toda la historia del torneo, había pasado algo así”, lamentan fuentes conocedoras del caso. La preocupación de los aficionados se enciende en las redes. Todos quieren respuestas y nadie puede explicar cómo a poco más de una semana de la final de la UEFA Europa League, ¡el balón oficial ha desaparecido!

Aseguran los que allí estaban que el pelotazo fue co-lo-sal, de esos que no se olvidan. Vamos, que te dejan boquiabierto. La sesión de prueba transcurría sin incidentes; los organizadores querían comprobar que el balón oficial estaba a punto, perfecto para la gran final de la UEFA Europa League del 21 de mayo en Bilbao.

Hasta la misteriosa desaparición, se había revisado que el balón oficial rebotaba de manera casi perfecta, volaba estable cuando se le exigía y se mantenía en el punto óptimo de inflado. Una delicia para cualquier forofo. Su antológica resistencia refulgía en el entorno de prueba. Los afortunados que ocupasen las gradas del estadio el gran día, sin duda, vivirían momentos mágicos. Muchos ya se acostaban y levantaban con los dedos cruzados para que el Athletic remontase en la vuelta frente al Manchester United en Old Trafford de esta semana.

Como hemos informado, sorprendió la fuerza del balón tras recibir el pelotazo. Todas las cabezas, hipnotizadas por su ímpetu, siguieron al unísono su trayectoria. El balón se elevó y se elevó hasta esfumarse entre el nubloso cielo de aquella mañana de primavera. Los presentes han insistido en que esperaron su caída durante un rato. Se hizo un silencio espeso. EL BALÓN OFICIAL SE HABÍA ESFUMADO.

Se ha filtrado que poco después, el responsable de la sesión de prueba pidió discreción para evitar que el pánico cundiese entre los aficionados. Demasiado tarde, los primeros tiktokers ya lamentaban la gran pérdida y habían ideado un baile reivindicativo para exigir su búsqueda que se había convertido en viral. El tema abrió la sección de Deportes del Informativo y numerosos expertos opinaban sobre lo ocurrido. Niños, jóvenes y mayores compartían su preocupación.

Lo cierto es que el balón desaparecido no era cualquier balón. Se trataba de la joya de la corona de Decathlon: el balón de Kipsta creado y especialmente diseñado por DECATHLON para la final de la UEFA Conference League. Una pieza única para el partido del 21 de mayo. Se había sometido a pruebas de calidad en las diferentes etapas de su fabricación para el mejor de los rendimientos al más alto nivel de competición. Los expertos recordaron que la Certificación Kipsta se obtiene tras un riguroso análisis de ingenieros de pruebas de campo. Un esfuerzo rotundo para aunar tecnicidad y equilibrio.

Kipsta, la marca técnica de fútbol de Decathlon, había decidido meses atrás que se uniría a la fiesta del 21 de mayo con esta serie limitada, ideada solo para esta competición europea. Tantas eran las ganas de celebración que Decathlon, además, había preparado había organizado diversas actividades para los aficionados en diversos puntos de Bilbao, la ciudad que acogería la final.

Múltiples interrogantes se sucedían. ¿Se mantendrían estos planes? Ahora, ¿se centrarían todos los esfuerzos en recuperar el balón de la UEFA Europa League? El destino se empeñaba en mirar de frente a Decathlon, que una vez más debería demostrar que lo suyo es siempre jugar a lo grande. ¿Lo conseguiría esta vez? La cuenta atrás ya ha comenzado…